Corrientes, Thursday 26 de March de 2015

El gobernador Ricardo Colombi presenció este miércoles la celebración litúrgica por la cual se ordenó como obispo co-adjuntor de la diócesis de Goya, al presbítero Adolfo Ramón Canecín, proveniente de Formosa.

El mandatario provincial estuvo en la oportunidad junto al intendente local, Gerardo Bassi y otras autoridades. Al finalizar la ceremonia, el nuevo obispo que acompañará Monseñor Ricardo Faifer en su misión pastoral, dijo que trabajará "por la unidad del pueblo", entendiendo que actualmente se vive en una "sociedad esquizofrénica".

Este miércoles por la tarde-noche se realizó la ordenación episcopal de Canecín, con una celebración religiosa que tuvo lugar frente a la iglesia catedral Nuestra Señora del Rosario de la ciudad de Goya. Miles de personas se congregaron allí para presenciar la ceremonia, que comenzó a las 19 y culminó pasadas las 22.

Desde la primera fila, junto a varios funcionarios y legisladores, estuvo el gobernador Colombi y a su lado, el intendente Bassi. De ese modo, ambos presenciaron la extensa ceremonia, al igual que la homilía de Faifer y las primeras palabras de Canecín como autoridad de la diócesis goyana.

El ahora obispo co-adjuntor de Goya, acompañará así a Monseñor Faifer en la misión pastoral de esa diócesis, además de constituirse en su sucesor natural. Canecín proviene de la ciudad de Formosa, donde era sacerdote de la iglesia San Francisco de Asís.

Al concluir su ordenación, desde el gran escenario montado para esta celebración, el nuevo obispo expresó: "Quiero ser un pastor que sepa escuchar el discernimiento del pueblo y trabajar por la unidad del mismo". Luego consideró que existe una falta de coherencia social en cuanto al pensamiento y la acción, al sostener que "tenemos una sociedad bastante esquizofrénica en muchos sentidos". Y como mensaje reflexivo le dijo a los fieles: "Cuando Dios y el hombre se ponen de acuerdo, ocurren maravillas", aclarando que "este ponernos de acuerdo tiene implicancias eclesiales y sociales".

Por su parte, Faifer al pronunciar su homilía, se refirió al rol del obispo, entendiendo que este es "hacer visible el vínculo de comunidad", al expresar que "un pastor tiene que caminar delante del pueblo para indicarle el camino y en ocasiones debe caminar detrás del pueblo, para ayudar a los rezagados". Dijo también que junto a Canecín "compartiré responsabilidades eclesiales para ser uno".

Vale mencionar  que también fueron parte de esta celebración el nuncio apostólico Emil Paul Tscherring, el arzobispo de Corrientes, Andrés Stanovnik, el obispo de Santo Tomé, Hugo Norberto Santiago y obispos de las provincias de Formosa, Misiones, Santa Fe, Entre Ríos y Chaco.