El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), José María Arancedo, viajará este jueves a Roma para participar del Sínodo de la Familia, que se realizará del 4 al 25 de octubre con el tema ''La vocación y la misión de la familia en la Iglesia y en el mundo contemporáneo''.

Durante su estancia en el Vaticano, Arancedo cumplirá 75 años y deberá poner a disposición del papa Francisco su renuncia.

En rigor, el arzobispo de Santa Fe ya envió a la Nunciatura Apostólica en Buenos Aires la comunicación formal para dar curso a ese trámite.

Además de Arancedo, participarán del Sínodo de la Familia dos obispos argentinos: el arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina, cardenal Mario Aurelio Poli, y del obispo auxiliar de Bahía Blanca y presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Familiar y Apostolado Laico, monseñor Pedro María Laxague.

Además, estará el rector de la Universidad Católica Argentina (UCA), monseñor Víctor Manuel Fernández, en calidad de miembro de la nómina pontificia y la doctora María Marcela Mazzini, profesora de la Facultad de Teología de la UCA, que fue nombrada auditora.

El Vaticano presentó en junio el "Instrumentum Laboris", que servirá de guía a los padres sinodales en los tres momentos que tendrá la Asamblea: la escucha de los desafíos de la familia, el discernimiento de su vocación y la reflexión sobre la misión.