Nacional, Thursday 30 de March de 2017

Es la más frecuente y principal causa de muerte en las mujeres de entre 45 y 55 años. Los controles son fundamentales.

El cáncer de mama es el más frecuente y la principal causa de muerte en las mujeres de 45 a 55 años. Sin embargo, en el 90% de los casos tienen posibilidad de curación si se los detecta en etapas tempranas, mejorando así el pronóstico y la calidad de vida. “La lucha contra el cáncer de mama representa una contienda exigente para los especialistas que nos dedicamos al tema. Nuestro objetivo es reducir la mortalidad a partir de la puesta en marcha de diversas estrategias para la detección precoz. Hay que comunicar para tomar conciencia. Aquí nuestro principal enemigo no es el cáncer en sí, sino el desconocimiento y la falta de información”, cuenta María Graciela Lettieri, jefa de Diagnóstico Mamario del Centro Médico Deragopyan.

Según la especialista, “a cada método de diagnóstico por imagen se le atribuye un gold estándar determinado que representa la capacidad óptima que tiene de detectar cierto tipo de patología ginecológica, obstétrica o mamaria. A su vez, cada patología estará asociada a diferentes factores que tienen que ver con la raza, la edad, la biología tumoral y la presencia de factores de riesgo relacionados con la posibilidad de desarrollar cáncer”.

Dado que la mama es un órgano cambiante que sufre modificaciones a lo largo de la vida de la mujer, desde la pubertad pasando por la madurez sexual y hasta la senectud. Para la detección temprana es importante la visita periódica al médico, los métodos de diagnóstico por imagen y el autoexamen mamario.

La visita al doctor debe ser, al menos, anual. La primera mamografía de base es indicada a los 35 años, y a partir de los 40 en mujeres sin riesgo se realiza anualmente. Cabe destacar que la mamografía sola no es capaz de detectar todos los casos de cáncer, razón por la cual el diagnóstico requiere a veces ser complementado con una ecografía o resonancia, entre otros estudios. El avance tecnológico de la mamografía digital contribuyó a lograr estos resultados y la utilización de software y herramientas digitales permiten mejorar y ampliar las imágenes en tiempo real reduciendo las recitaciones, además de permitir el almacenamiento de las mismas y facilitar las interconsultas entre médicos.

En el caso del autoexamen mamario son dos pasos: inspección y palpación. Esta técnica demostró su eficiencia en forma mundial. Una vez adquirido el hábito mensual del reconocimiento de las estructuras glandulares normales de sus mamas, cada mujer será capaz de reconocer anormalidades e inmediatamente acudir al médico.

Como toda patología, tiene factores de riesgo a los que hay que estar atentos para poder prevenirlos: antecedentes familiares, personales (menarca precoz y menopausia tardía), biopsia previa y sobrepeso/obesidad.

Cuidarse con las comidas suma

La prevención de cualquier tipo de cáncer requiere de cambios en el estilo de vida. El sobrepeso y la obesidad aumentan la posibilidad de desarrollar cáncer de mama sobre todo en la menopausia.

La OMS sugiere tener una dieta balanceada, más verduras y frutas que tienen propiedades antioxidantes e ingerir menos alimentos con grasas. Y moderar el consumo de alcohol.