Nacional, Tuesday 13 de March de 2018

Tres sicarios atacaron de cuatro balazos ayer a la madrugada a un colaborador del interventor gremial de la Uocra La Plata, Carlos Vergara, mientras que mataron a su cuñado, con quien se encontraba en la puerta de su casa en Rosario.

Del ataque fueron víctimas Juan Garcilazo, de 44 años, quien murió en el acto tras recibir un tiro en una pierna y dos en la espalda, y Julio Galván, de 56, quien se encuentra hospitalizado y debió recibir varias intervenciones quirúrgicas luego de recibir un tiro en una pierna, otro en un hombro, otro en el pecho y un cuarto en los instestinos.

El hecho ocurrió a la madrugada, cuando Galván se preparaba en la puerta de su casa para viajar a La Plata, donde se desempeña como colaborador gremial de Vergara en la sede de la Uocra de la avenida 44 y donde se aloja de lunes a viernes, mientras que pasa los fines de semana en su ciudad de origen, Rosario.

Según trascendió, por el hecho ya hay dos detenidos mientras se busca a un tercer participante. Fuentes cercanas al gremio dijeron que los detenidos serían residentes de Rosario.

Una de las principales hipótesis que manejan los investigadores apunta a la interna gremial que se desató en nuestra ciudad tras la detención del ex líder de la Uocra, Juan Pablo “Pata” Medina, que permanece detenido en Ezeiza junto a parte de su entorno, acusado de amenazas y lavado de dinero.

Ayer, el interventor Vergara desestimó la idea de una interna o que el ataque se vincule al gremio, aunque no descartó que se trate de un “ajuste de cuentas”.

No obstante, recordó que en septiembre del año pasado, al asumir la intervención de la sede gremial, debió denunciar en la justicia distintas amenazas que recibió, en medio de la convulsión que provocó la destitución y detención de Medina.

Sin embargo, afirmó que en la actualidad el desarrollo de la actividad de la intervención se da “con normalidad”, aunque indicó que, al menos, faltan “dos años” para poder volver a convocar a elecciones por la conducción del sindicato de la construcción en nuestra región.

La detención del ex secretario general de la Uocra Juan Pablo “Pata” Medina el pasado 26 de septiembre y de buena parte de su familia provocó en nuestra ciudad una fuerte conmoción, luego de que el hasta entonces líder gremial se manejara entre los partícipes del rubro, como empresarios, trabajadores y controladores estatales con total impunidad.

Mientras la investigación en contra de Medina y sus socios sigue su curso, varias han sido las voces locales que han observado el profundo sacudón que provocó el descabezamiento gremial y la ausencia de conducción de un buen número de militantes y agremiados que usaban la violencia para ejercer la hegemonía en sus barrios y en las obras.

Esta situación provocó la emergencia de distintas internas entre grupos que buscan erigirse con el próximo liderazgo gremial, algo sobre lo que Vergara fue ayer excesivamente “prudente”.