Mercedes, Wednesday 5 de December de 2018

Por Francisco Frezzini. Protagonistas- Padre Julián Zini - Roberto Alvira y Antonio “Tony” Troncoso y El Gaucho Gil

Este relato lo contó el Sr. Antonio “Tony” Troncoso, destacado periodista agropecuario, que conduce un programa en el Canal Rural y un programa radial en radio Libre ex radio Libertad.

Roberto Alvira, ya fallecido, periodista, propietario y director del Semanario Paiubre.

Padre Julián Zini, sacerdote excelente, músico poeta, con gran popularidad por sus prédicas y sus trabajos artísticos.

Antonio “Tony” Troncoso era profesor de la Escuela Agrotécnica cuando dependía del obispado de Goya. Le dieron una vivienda en la calle Chacabuco, junto a los scouts, en principio vivió solo, cuando vino el Padre Julián Zini, le pidió para vivir en la misma casa, obviamente Troncoso accedió de muy buen grado,

El músico recitador Chacho Semhan, iba a contraer matrimonio, en Corrientes, capital con una señorita capitalina, le pidió al Padre Zini que sea el padrino de bodas.

El señor Roberto Alvira, propietario y director del semanario Paiubre, muy amigo del padre Julián Zini, se ofreció para llevar al padrino a la boda y le pidió a Antonio Troncoso, que lo acompañe en el viaje, a Corrientes.

Los tres amigos partieron para la capital. Era el año 1962, en el Falcón del señor Roberto Alvira. Al pasar por la Cruz del gaucho Antonio Gil, ubicada a 8 kilómetros de la ciudad de Mercedes Corrientes, el padre Julián le dijo a Alvira.” Roberto, pasá despacio por la Cruz del Gauchito, lo vamos a saludar, no digo que pares, pero aminorá la velocidad y le tocamos unas bocinas” así viajamos sin inconvenientes.,

Roberto Alvira, hizo caso al pedido del padre, aunque no estaba muy convencido de que el Gaucho podía ayudarlos en algo .Al pasar por la Cruz del Gaucho Gil, disminuyó la velocidad e hizo sonar la bocina estridente de su Ford Falcón. El padre se persignó, Antonio Troncoso hizo lo propio.

Al llegar a la localidad de Desmochado, había comenzado a oscurecer, prendió la luz roja del tablero del automóvil, señal que no cargaba la batería

“Qué hacemos” preguntó Roberto. Y el mismo contestó a la pregunta “Seguimos hasta donde podemos” vamos a ver si llegamos a Bella Vista, allí puede ser que nos arreglen el dínamo, no voy a prender la luz, solo las más bajas” Llegaron a Bella Vista, a la vera de la ruta un taller mecánico, todo servicio, muy buena y servicial la persona que atendía, pero no podía arreglar el dínamo, en poco tiempo seguramente había que cambiar el inducido y recomendó viajar sin encender ninguna luz, porque la batería estaba casi agotada.

Debían llegar, para el casamiento, el padre Zini era el padrino de bodas, era ya de noche y muy oscura, nula visión, pero había que continuar. Fue entonces cuando desde atrás del automóvil, apareció de improviso una luz potente, proveniente de un reflector, que les iluminó el camino. Un vehículo que no pudieron identificar se le puso a la par y una voz dijo” Yo los alumbro de atrás, pongan el auto a 80 kilómetros, de velocidad yo los alumbro de atrás”. “Hace rato los vengo siguiendo”.

Roberto Alvira, puso el Ford Falcón a unos 80 kilómetros por hora, obedeciendo la orden. El poderoso reflector similar a los usados para cazar en el campo, alumbraba el camino.

“Llegamos a Corrientes, ingresamos por una avenida, la ciudad en ese entonces no estaba muy iluminada, los focos eran de baja intensidad y algunas calles carecían de iluminación. Llegamos a la iglesia, los invitados y curiosos esperaban a la novia, el padre Julián Zini bajó raudamente y esperó a la novia a la entrada del templo” dijo en su relato Antonio Troncoso.

“Con Roberto Alvira nos quedamos un poco más afuera, no éramos invitados. Nos acordamos vamos a agradecerle a la persona que nos iluminó el camino. Fuimos pero no encontramos a nadie, ningún auto tenía reflectores, buscamos pero no hallamos a nadie con esas características, preguntamos y nadie había visto nada similar a nuestra descripción” continuó su relato Antonio Troncoso.

“La ceremonia se realizó como estaba prevista, era la primera y última vez que me enteré que un sacerdote era padrino de bodas” comentó Troncoso.

“Cuando al otro día arreglamos el dínamo del auto y nos alistábamos para regresar, el padre Zini se quedaba en Corrientes, nos recomendó” “Cuando pasen por la cruz del Gaucho Gil, disminuyan la velocidad y toquen bocina en señal de agradecimiento, fue él el que nos trajo a Corrientes y nos iluminó el camino”

29 de noviembre aniversario del fallecimiento del periodista Roberto Alvira Fundador y Director del Semanario. Paiubre