Internacional, Monday 21 de December de 2020

Más de una veintena de países de Europa, Asia, África y América -incluída la Argentina-, prohibieron los vuelos desde y hacia el Reino Unido,como consecuencia de la nueva cepa del coronavirus que circula por Londres y el sudeste de Inglaterra.

El temor al desabastecimiento y al aislamiento se sumaban este lunes a la paranoia sanitaria en el territorio británico luego de que Francia cerrara sus fronteras y más países prohibieran vuelos al Reino Unido por una nueva cepa más contagiosa del coronavirus que obligó a confinar a Londres y el sur de Inglaterra.

La decisión francesa, que se prolongará por al menos 48 horas, desató una ola de preocupación, porque miles y miles de camiones quedaron impedidos de cruzar el Canal de la Mancha por el Eurotúnel, al igual que los cientos de barcos que navegan de un lado a otro transportando mercancías.

Una importante cadena de supermercados, Sainsbury's, anunció que si Francia mantiene su decisión de cerrar el paso de los camiones que cubren la ruta Calais-Dover a través del Eurotúnel -inactivo desde la tarde del domingo- "comenzaremos a ver escasez de alimentos en los próximos días, sobre todo alimentos frescos como lechugas, coliflor, brócoli o cítricos.Varias de las sucursales de la cadena estaban atestadas de clientes a primera hora de este lunes, con gente que llenaba sus carros.

El Gobierno británico convocó en las próximas horas una reunión de crisis, que será presidida por el primer ministro británico, Boris Johnson, mientras los enormes embotellamientos se extendían también por el condado de Kent, en el sureste de Inglaterra, donde al menos 6.000 camiones permanecen varados, señala la BBC.

Virtualmente aislado por la prohibición de vuelos desde y hasta Reino Unido -medida a la que además de Francia se sumó una larga lista de países, entre ellos España, Portugal, Canadá, India, Hong Kong, Rusia, Marruecos, Polonia, Argentina, Perú, Colombia, Chile, e Israel-, Londres enfrenta la nueva cepa, de peligrosidad aun desconocida y con una capacidad de contagio mayor, según los expertos.

Otros países como Suiza, impusieron una cuarentena a los viajeros procedentes del Reino Unido, que tiene carácter retroactivo para las llegadas después del 14 de diciembre.

Esta variante del virus sería hasta un 70% más contagiosa, aunque no está aún demostrado que sea más mortífera, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), que advirtió que también podría afectar a "la eficacia de algunos métodos de diagnóstico".

Por todo ello, la OMS instó a "reforzar los controles" en Europa ya que fuera del territorio británico se detectaron varios casos de esta nueva cepa al menos en Dinamarca, Italia, Holanda, Australia, Israel -donde murió un paciente que se había reinfectado con la nueva variante del virus- y Sudáfrica.

Los responsables de Estados Unidos dijeron que observan "con mucho cuidado" la variante del virus que se propaga en el Reino Unido pero no se plantean por ahora prohibir los viajes desde o hacia el país.

Este lunes, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) dio su visto bueno a la vacuna de Pfizer/BioNTech, para que la campaña de vacunación en la Unión Europea (UE) se inicie a partir del 27 de diciembre.

EEUU, Reino Unido, Canadá, México, Costa Rica, Ecuador, Arabia Saudita, Israel, Singapur y Suiza forman parte de la quincena de Estados que ya autorizaron la vacuna Pfizer/BioNTech.

Por otra parte, los expertos de la EMA corroboraron este lunes la opinión de sus pares estadounidenses y de diversos países europeos que consideran que las vacunas actuales contra el coronavirus son efectivas también para esa cepa.

"Por el momento, no hay pruebas que indiquen que esta vacuna (de Pzifer/BioNTech) no funcionará contra la nueva cepa" de coronavirus, dijo la directora general de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), Emer Cooke.

El Reino Unido ya empezó su campaña general de vacunación hace dos semanas, usando también el fármaco desarrollado por los laboratorios Pzifer/BioNTech.

El surgimiento de esta nueva cepa no podía caer en un peor momento para el Reino Unido, inmerso también en negociaciones sobre su relación posbrexit con la Unión Europea, que parecen estar en un callejón sin salida.

La nueva cepa "está fuera de control", reconoció este domingo el ministro británico de Salud, Matt Hancock, que justificó así el reconfinamiento de Londres y del sureste de Inglaterra, antes de anunciar que "será muy difícil mantenerla bajo control hasta que una vacuna esté ampliamente difundida", agregó.

Reino Unido informó este lunes una cifra récord de infecciones diarias, con 35.928 nuevos casos, casi el doble que la media de unas 18.000 diarias detectadas la semana anterior.

Las fiestas se verán reducidas a su mínima expresión y las reuniones deberán realizarse sólo entre personas del mismo hogar incluso el día de Navidad, en la capital y zonas del sur y sureste del país.