Al grupo de riesgo se solicita vacunarse con la antigripal. En esta época predomina Influenza A, en menor medida Influenza B y Coronavirus.
El Ministerio de Salud Pública de la Provincia, bajo la conducción de Ricardo Cardozo, emitió un alerta a la población para reforzar las medidas de prevención frente al incremento de enfermedades respiratorias, típico de esta época del año. Con el descenso de las temperaturas, los virus como Influenza A —actualmente el más frecuente—, Influenza B, Coronavirus y rinovirus, que causa el resfrío común, tienden a propagarse con mayor facilidad.
La directora general de Epidemiología, Angelina Bobadilla, explicó que “empezaron las afecciones respiratorias propias del otoño y se irán intensificando en invierno. Esperamos el pico de casos para finales de junio y julio”. Por eso, instó especialmente a las personas que integran grupos de riesgo a vacunarse con la antigripal.
Entre estos grupos se encuentran los mayores de 65 años, niños menores de 2 años, personas con enfermedades crónicas y embarazadas. En este último caso, se recomienda la aplicación de la vacuna contra el Virus Sincicial Respiratorio (VSR) entre las semanas 32 y 36 de gestación, con el fin de proteger tanto a la madre como al bebé.
Bobadilla también alertó sobre posibles complicaciones en los cuadros respiratorios: “En la población más susceptible puede derivar en neumonías o bronquiolitis”, por lo que insistió en la necesidad de completar los esquemas de vacunación.
Además de las vacunas, se recomienda ventilar los ambientes, lavarse las manos con frecuencia, toser o estornudar en el pliegue del codo y usar barbijo en caso de presentar síntomas. También es fundamental mantener una alimentación equilibrada y continuar con la actividad física regular. En ese sentido, se destacó el valor nutricional de las frutas y verduras de estación para fortalecer el sistema inmunológico.
Precauciones en el uso de calefacción
La cartera sanitaria también emitió una serie de advertencias para prevenir accidentes domésticos durante el uso de artefactos de calefacción. Se recomienda:
Encender y apagar braseros o estufas a leña fuera de la vivienda.
No utilizar hornos ni hornallas para calefaccionar.
Evitar colocar recipientes con agua sobre fuentes de calor, ya que la humedad favorece la proliferación de hongos.
No arrojar plásticos, gomas ni metales al fuego.
No fumar dentro del hogar y mantener los ambientes libres de humo.
Síntomas y cuidados
En caso de presentar síntomas como fiebre o malestar general, se aconseja quedarse en casa, evitar el contacto con otras personas hasta sentirse mejor y que hayan transcurrido al menos 24 horas sin fiebre. También se recomienda no automedicarse ni recurrir a remedios caseros, ya que podrían dificultar el diagnóstico o generar efectos adversos.
Finalmente, se solicita extremar los cuidados al estar en contacto con personas vulnerables, especialmente durante los primeros cinco días desde el inicio de los síntomas, y hasta diez días con medidas como el uso de barbijo, buena ventilación y lavado frecuente de manos.