Las autoridades de Nueva York confirmaron esta semana la identificación de los restos de tres víctimas de los atentados del 11 de septiembre de 2001, en la ciudad de Nueva York, tras más de dos décadas de esfuerzos forenses impulsados por avances en tecnología de ADN.
Se trata de Ryan Fitzgerald, un comerciante de divisas de 26 años; Barbara Keating, una ejecutiva jubilada de 72 años de una organización sin fines de lucro, y otra mujer cuyo nombre se mantiene en reserva a pedido de su familia.
Los tres fueron identificados a partir de diminutos restos humanos hallados entre los escombros del World Trade Center, luego de que aviones secuestrados por el grupo Al Qaeda impactaran contra las torres gemelas, el Pentágono y un campo en Pensilvania, causando casi 3.000 muertes, de las cuales más de 2.700 ocurrieron en el complejo neoyorquino.
Según informó el diario Los Angeles Times, la oficina del médico forense de Nueva York sometió los fragmentos a múltiples pruebas a lo largo de los años. Las mejoras en las técnicas permitieron recuperar información genética degradada por factores como el fuego, la luz solar y las bacterias, posibilitando ahora su identificación.
Este hallazgo se suma a la labor continua por devolver una identidad a todas las víctimas del peor atentado terrorista en la historia de Estados Unidos.
Fuente: NA
