Nacional, Tuesday 18 de November de 2025

La magistrada no podrá ejercer funciones en el ámbito judicial ni recibirá su jubilación.

Después de seis audiencias de debate, el jurado de Enjuiciamiento decidió destituir a Julieta Makintach como jueza por unanimidad, con 11 votos a favor. Las irregularidades en el juicio por la muerte de Diego Maradona fueron el motivo principal de esta decisión. Además, se le prohibió ocupar un cargo judicial en el futuro. La exmagistrada no estuvo presente para escuchar el fallo.

El veredicto se anunció el martes a las 10:40 en el Anexo de la Cámara de Senadores de la provincia de Buenos Aires, donde se había llevado a cabo todo el proceso, que se originó a raíz del escándalo generado por el documental “Justicia Divina”, en el que Makintach participó durante el debate oral por el fallecimiento del futbolista.

Los 11 miembros del jurado, presidido por Hilda Hogan, presidenta de la Suprema Corte Bonaerense, alcanzaron el veredicto por mayoría durante el fin de semana, plasmado en una sentencia de 115 páginas. La última audiencia del jury se realizó el jueves anterior, donde se presentaron los alegatos de las partes involucradas.

Verónica Ojeda, el hijo de Maradona, Dieguito Fernando, y su pareja, Mario Baudry, quien también es abogado en el caso, asistieron por primera vez al jury y escucharon la resolución desde la primera fila.

Con la destitución, Makintach no podrá ejercer funciones en el ámbito judicial ni recibirá su jubilación como magistrada. Este desenlace contrastó con lo que ella había esperado; su intención era que el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, aceptara su renuncia presentada en junio, lo que le habría permitido aspirar a un futuro cargo en la Justicia.

Hasta el jueves, cuando se realizaron los alegatos, Makintach mantenía la esperanza de que el fallo sería favorable.

Durante los alegatos, la fiscal Analía Duarte, quien lideró la acusación, fue clara: “La doctora Makintach ha perdido las condiciones que exige la Constitución para el ejercicio de la magistratura y entiendo que corresponde su destitución”, afirmó mientras miraba al jurado de Enjuiciamiento.

Duarte detalló que se comprobó que Makintach aceptó la propuesta de su amiga sobre el documental, bajo la condición de que fuera aprobada y supervisada por ella. “Makintach conocía el trailer. Que el guion ya estaba agregado en febrero. En marzo ya estaban los 6 títulos de los 6 capítulos. Ya estaba el título ‘la Justicia y la sentencia’. En marzo la doctora ya sabía que había una condena”, aseguró en su alegato. Añadió que el testigo Arnal, dueño de la productora, había declarado que “era una miniserie sobre el juicio por Maradona y nosotros teníamos a la jueza”. Esto, según Duarte, significaba que todo el proceso no se podría haber llevado a cabo sin la participación de Makintach.

Guillermo Sagues, quien encabezó al Colegio de Abogados de San Isidro en la acusación, comentó a Infobae tras el veredicto: “Se ha comprobado en este debate y en la prueba que es el daño enorme que se le ha hecho a la justicia de la provincia, pero no solamente a la justicia de la provincia sino a toda la justicia argentina que ha quedado ridiculizada”.

La resolución sobre la destitución será enviada a la Suprema Corte en los próximos días.

La presidenta de la Suprema Corte Bonaerense, Hilda Hogan, fundamentó su voto a favor de la destitución al señalar que “la magistrada llevó adelante conductas alejadas de la sobriedad, prudencia y moderación exigibles a todo servidor del Poder Judicial de la provincia de Buenos Aires”.

El senador bonaerense y conjuez del jury, Sergio Vargas, expuso durante el veredicto en La Plata que “cuando se encienden las cámaras, corre peligro que el ego de un juez apague la justicia”. Agregó que “cuando un juez hace de sus actos una búsqueda de atención mediática, con claros fines de fama o notoriedad, genera una sospecha fundada de que las decisiones o acciones del juez no están motivadas únicamente por la ley, sino por el deseo de ser la jueza del caso”.

Pablo Agustín Grillo Ciocchini coincidió en que la conducta de la jueza privó a los acusados de un tribunal imparcial y que sus motivaciones eran ajenas a la función judicial. Fabián Ramón González, otro de los conjueces, subrayó que “quien no distingue, por sí, lo que está bien de lo que está mal, no posee las condiciones suficientes para el ejercicio de la Magistratura”.

Guillermo Ricardo Castello, Ariel Martínez Bordaisco, Mirta Daniela Greco, Maite Milagros Alvado y María Victoria Lorences adhirieron a los fundamentos de la presidenta, remarcando su “sincera convicción sobre la gravedad de los hechos”.

Álvaro García Orsi concluyó que “las faltas que se reprochan revisten la misma gravedad desde el punto de vista de la conservación o pérdida de las calidades requeridas para el ejercicio de la magistratura, ya se trate del proceso por la muerte de Diego Armando Maradona o del más anónimo de los individuos”.

Fuente: C3